martes, 31 de mayo de 2011

Combates



(los textos sumerios más herméticos dicen que el principio y el fin comparten la misma opacidad; que sólo se diferencian por el combate que transcurre entre ambos extremos)

7 comentarios:

  1. Y ha de ser, eh...combates y treguas y otros detalles.Es posible, si.
    saludos

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  2. La serpiente mordiendo su cola, la mañana persiguiendo a la noche (¿acaso no están en la madrugada ¡el día y la noche juntos!) y una palabra abrazando su Fin. ¿En qué parte -realmente- comienza el aro? ¿Cuál es el punto en el que comienza a surgir la esfera? Están muy lejos los Sumerios -para mí-, tengo más cerca, muy cerquita mi-tu-vuestra escritura.
    Un abrazo, Jean.

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  3. Hola Jean,
    Vaya... con la imágen y más con el texto me vino el concepto filosófico del eterno retorno, pero no como una simple repetición cíclica de los mismos acontecimientos sino en el sentido que lo recoge Nietzche cuando habla del "Superhombre", como la repetición no sólo de hechos sino de pensamientos, sentimientos,... El filósofo argumenta que en esa repetición del pensamiento el hombre se convertirá en superhombre cuando aprenda a vivir sin miedo.
    El "combate" entre principio y fin lo he visto inducido por ese miedo. Es una opinión o evocación muy personal.
    Seguramente lo que digan los sumerios no tiene nada que ver con todo lo que he procurado expresar pero siempre intento ser honesta con la inspiración que me produce la lectura de los textos, en este caso el tuyo.
    Disculpa si a veces una se va "por los cerros de Úbeda".

    Un abrazo.


    Gabriela Amorós - La Emoción Indomable.

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  4. Lobamarino, no sólo es posible, sino que hay harta probabilidad e incluso certeza. Depende del azar (y de otras confluencias)

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  5. No creas, Julio, que hay civilizaciones que estén lejanas absolutamente. Si se leen textos antiguos de culturas incluso desaparecidas nos asombramos de su vigor, su modernidad, su aplicación a nuestras personas y a nuestros días. Nada es totalmente nuevo en cada paso que da el hombre. Muy interesantes tus preguntas-metáfora. Y sin embargo es probable que sí haya un punto donde algo comienza a partir de otro estadio anterior, reelaborándolo, porque las dimensiones del universo aún no están todas comprendidas por nuestra especie.

    Si te das cuenta, además, cada vez que el hombre descubre (cree descubrir, es decir, cree interpretar) algún principio de la física se traduce inmediatamente en su aplicación para construir recuros, medios, armas, etc. aunque no sepa situar todo su proceso y desarrollo.

    Pero es nuestra condición, y somos parte de esa físis y no de doctrina alguna.

    Un saludo transoceánico.

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  6. Gabriela, la intención no era hablar del eterno retorno, aunque hay muchas imágenes que suscitan analogías, comparaciones y relaciones varias. Tampoco me gusta mitificar demasiado la idea del eterno retorno, simplemente porque nunca se ha abandonado del todo las referencias temporales (la imagen de la infancia la tenemos en cuenta cada día, nuestra piscología sigue teniendo una dosis semejante a la que tuvimos, y sus cambios de madurez están poseídos por los elementos que nos nutrieron y que seguimos reproduciendo)

    Haces bien en señalarme el concepto de Friedrich, es algo qué últimamente prospecto más. Pero a veces veo idealismo en sus presupuestos, donde prima el deseo por alcanzar un estadio, versus la realidad del estadio natural y social de los hombres. Dudo de la desaparición del miedo. Es un mecanismo sin el cual la especie no podría sobrevivir, no sabría protegerse, ni buscar las maneras y los recursos para defenderse y avanzar. Al menos eso dicen los etólogos.

    No, no me parece que te vayas por los cerros de Úbeda, es que las escrituras se prestan a volar y las más oscuras a extraviarnos (lo siento por lo que me toca) Espera a ver si lo que trato de sugerir va por el enfrentamiento entre los extremos...o hay otra cosa.

    Me complacen esas sugerencias.

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  7. Bienvenida, Melodi. Te veo con empuje idealista y misionero. Por supuesto, miraré los mensajes que emites en tu blog, pero de entrada te diré que no me siento acomplejado por esos supuestos pensamientos negativos que a ti te parece ver en mis escritos. Si no asumimos los opuestos (positivo-negativo) como complementarios y precisos para entender el sentido de cada uno de ellos, no captamos la vida en lo posible.

    Hay que seguir, Melodi, hay que vivir, hay que distinguir. Un saludo fraterno.

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