jueves, 5 de mayo de 2011

Selvatico



Legañosas y tibias luces las que cuestionan nuestra pasividad. No vienen a despertarnos; tan sólo nos avisan de que la vida en tinieblas acaba creando ciegos. Admoniciones para seres perplejos. 



9 comentarios:

  1. Cierto, Jean, qué bonita la dudosa luz del amanecer, esa lengua rosácea. ¿viste lo que me ocurrió la otra mañana?
    Saludos blogueros

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  2. Se vislumbra, en el trapecio de la oscilación, el rostro de Gregorio Samsa kafkianizado: vivir en la frontera del dejar de ser sin una voz que nos identifique con quien fuimos antes de la metamorfosis inducida.

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  3. José Aº. Cuando es calma lo que nos embarga, sea a la luz de amanecer, en medio de la oscuridad o serpenteada nuestra habitación por las sombras, todo resulta hermoso. Voy a ver tu post.

    Saludos.

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  4. Riesgos de ser insectos, Ábradas. Bienvenido.

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  5. No creo, Jean, que en tanto la vida en tinieblas acabe creando ciegos, del otro lado la vida en la luz (día) acabe creando iluminados. En algo sí estoy enteramente de acuerdo, algo de nosotros que no nos pertenece, sino, nosotros a "ello" trata siempre de alcanzarnos más allá de la inteligencia.
    Abrazos.

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  6. Julio, todo es relativo, naturalmente. Los que ven claro hoy pueden mañana no ver (y vice) Medito lo que dices, me viene bien ampliar la perspectiva (o mejor dicho, mi visión de la misma)

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  7. cuantas veces nos encontramos en situaciones de obscuridad y debemos proceder -al tanteo- , identificar la luz al final del tunel, tratando de evitar el tunel del tren, con el tren llegando.., o tan solo encontrar el borde de la puerta con la nariz..; en fin somos seres indefensos.
    me agrada la atmòsfera de este blog, gracias por seguir el mio
    un abrazo
    Blas

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  8. Blas. Me gusta tu metáfora. Sí. Somos indefensos pero con capacidad de reacción, ¿no crees? La historia humana es así. Lo que menos soporto de ella es que se lo crean la humanidad o los individuos, más allá de nuestros límites. Que exista tanta soberbia, tanta irreflexión, tanta búsqueda del beneficio mercantil...que puede condicionar y machacar nuestro planeta. Un abrazo, pues.

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  9. Blasblog, ya veo que tu coment sigue aquí. Pero no mi respuesta. Que me gusta tu símil, oye. Y que pienso que hay que relativizar nuestra indefensión. Hay momentos en que sí la tenemos, pero la marcha es imparable, aunque muchas veces tengo la sensación de que también suicida.

    Gracias por pasarte, Un abrazo.

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