jueves, 31 de marzo de 2011

Indolencias (IV)




Mas la simbiosis de la tierra y el cielo tenía que procurar inevitablemente otra materia. Tal vez permanecía oculta, acaso no se había revelado. No había tenido su momento, ni su condición. Participaba del caos, pero se estaba fraguando. Sin prisa, sin parada, sin imagen, sin destino claro.



miércoles, 30 de marzo de 2011

Indolencias (III)




¿Cuándo brotó el color? ¿Antes o después de las formas? ¿Venían juntos o se encontraron? Ni los volúmenes se perfilaban del mismo modo ni el color era único. Tampoco los días y las noches hablaban el mismo lenguaje.

martes, 29 de marzo de 2011

Indolencias (II)



Y al desplegarse los ramajes, se abrieron otras frondas. Tras trenzarse las hojas de la luz, se pergeñaron difusas imágenes. Llegaron con las gotas del alba. Nacieron de la saliva de los ríos.

lunes, 28 de marzo de 2011

Indolencias




En el principio no fueron los dioses. Y sus dominios no existían. Tampoco sus prescripciones. Ni sus intrigas. La naturaleza sólo se miraba en sí misma.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Disoluciones. y 6




Remolino. Ni agua ni fuego. Ni viento ni tierra. El eje invisible actúa como un huso donde se enredan los hilos cambiantes. El efecto es tan hipnótico que precipita miradas y anula una exégesis. Son los sentidos los que se dejan tocar por la oscuridad telúrica. Se escucha un eco hondo peligrosamente atractivo.


martes, 22 de marzo de 2011

Disoluciones. 5




La fragua chispea. El rescoldo principal expide sus destellos. Acaso buscan anidar en otro espacio. Converger en un nuevo núcleo. ¿Cuántos elementos coexisten en una simbiosis  tan difícil como necesaria? El relevo descuella echando un pulso al efímero círculo. La luz es para todos, sin arrogancias.

lunes, 21 de marzo de 2011

Disoluciones. 4




Y el signo se manifiesta. Fundido en un espacio donde se concentran las energías complementarias. No hay nunca milagro. La dinámica del azar es absolutamente el presente. Veloz y pasajera, causa y efecto, demostración y cambio. Se contrae en una interiorización donde coge carrera. ¿Hacia dónde?

domingo, 20 de marzo de 2011

Disoluciones. 3




Como lengua de fuego rasga la superficie. No se queda en ella. Parece reflejo, pero al ir más allá resulta otra cosa. Un agujero desplaza el líquido. Los ojos permanecen en éxtasis. No alcanzan a ver. Solamente esperan una señal.



sábado, 19 de marzo de 2011

Disoluciones. 2



Si se expande, si se retrae. Si se combina, si se rompe. Sin saber si un invisible eje axial repele o convoca. Las partículas sugieren la apertura de un camino. Su invisibilidad lo hace imperceptible. ¿En qué dirección va?


viernes, 18 de marzo de 2011

Disoluciones



No saber si primero fue la disolución. La mirada resquebrajada de la luz. Una extensión que va deshaciéndose a cada instante, porque cada paso es otro. No hay dos reflejos idénticos. Ni su efecto en el contexto posee la misma densidad.


miércoles, 9 de marzo de 2011

Punto de fuga, punto de entrega




Puede ser tu punto de fuga. Pero también el avance de tu entrega. Aúnas los dos pasos con los ojos entornados. Como si no quisieras saber qué queda atrás ni qué te espera por delante. Ése es el presente. El instante, lo que vives, lo que tensa tu cuerpo. Y todo lo que gira dentro de ti y todo lo que bulle en tus pretensiones. Una actualidad efímera que sucede a otra que toma el relevo de otra. Suma de fugacidades que igualan la consistencia.  

lunes, 7 de marzo de 2011

La picardía



Sublime tentación. Jugar con ventaja para acaparar. ¿Y qué garantiza esa actitud? Probablemente que los demás se molesten. Que merme tu credibilidad. Que tampoco alcances tu objetivo. Y sin embargo, hay algo de divina gracia en tu mirada que conquista y está a punto de situarte en preeminencia. No estés seguro. La diosa sabe de cada cual. Y le coloca en su justo término.  


domingo, 6 de marzo de 2011

La reacción




Pero esa resistencia la pruebas con tu práctica. No basta con contemplar el mundo, que se debe. No es suficiente babearse ante la belleza, que conviene. No es justo esperar sólo a recibir, que es grato pero pide a cambio. No es de recibo la indiferencia, aunque en ocasiones se evoque una cierta suerte de justa indolencia. El riesgo de hacer dejación es que siempre pertenecerás a otros. Incluso al lado obscuro de ti mismo.  



viernes, 4 de marzo de 2011

Melancolía



¿Es la posesión o es la privación lo que induce a esa mirada perdida? No debes rivalizar dentro de ti. Huye tanto de la carencia que te inutiliza como de la apropiación que te anula. Con frecuencia, al final ambos estados pueden confluir negativamente, haciéndote la vida insufrible.  Importa adoptar un a modo de apartamiento del objeto deseado para que no devore tus entrañas. A partir de ahí será posible medir tu resistencia.


jueves, 3 de marzo de 2011

El apresuramiento



Esa presura locuela, ¿para tratar de llegar a dónde? El entusiasmo de los fines no debe hacernos precipitar el ritmo. Una mala pisada y la caída nos privará que lleguemos los primeros. Pero ¿para qué ser los primeros, ni los segundos? Adaptarnos a nuestras posibilidades. El camino no va a variar. Que el ejercicio no sea competencia, que la velocidad no se convierta en desenfreno, que el entusiasmo no se traduzca en decepción. Encontrar nuestra propia dinámica.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Placidez



Arrobado ante los acontecimientos que no parecen ir con uno mismo. No condicionado por la urgencia ni por la responsabilidad ni por la exigencia. Un estado ajeno a cualquier obligación, apartado del cumplimiento del tiempo inexorable. Sentirse en un abandono que no es pérdida, en un aislamiento que no es huída, en una complacencia que no es ocupación.