viernes, 1 de julio de 2011

Simbiosis. 8.




Ante las admoniciones que surgen de lo más profundo, el gesto se contiene. Las palabras emitidas callan. El silencio queda en pensamiento latente. Una circulación íntima en que la senda se llama reflexión. La crispación se relaja, o queda en el cerco de un tiempo que no debe salir del ser. ¿Cuánto dura el tiempo de las palabras? ¿Cuánto sobrevive a aquéllas el tiempo del gesto? Extraña connivencia en que ambas expresiones se postran ante la idea. ¿O ante el impulso de los sentidos?

10 comentarios:

  1. El gesto contenido es la base de todas las artes que congelan el movimiento. Esa contención es la emoción que las define. Por cierto, esta serie de reflexiones artísticas, vitales, me está encantando. Saludos.

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  2. Ante ambas, me parece que se postra ante ambas. Hace mucho no comentaba, pero te leo. Lo que escribes me envuelve en una sustancia viscosa que me produce bienestar, me llena. Gracias por eso. Un saludo.

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  3. El gesto contenido, la palabra contenida, el pensamiento hirviendo...¡Qué dinámica tan interesante se produce en el espíritu humano! ¡Qué capacidad proyecta nuestra materia! ¡Qué desarrollo evolutivo genera vida continuamente! (Observo la bajada de los árboles de los primates que llegaron a ser otra especie y me asombro)

    Gracias, José Luis, me gusta tu aportación.

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  4. Susan. Me alegro saber que sigues. Simplemente, la sensación ya nos aporta. Siempre me ha pasado. La sensación es refleja, un rayo: antes de racionalizar algo ya nos dota de la conciencia de que nos gusta algo, de que nos hace estar bien, de que nos abre a nosotros mismos, de que somos un pozo sin fondo...

    Vuelve cuando quieras.

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  5. sabe que todavia no se como la tengo en mis contactos? debe haber sido una noche de curda.. en fin.. disculpe la molestia,vine porque vi actualizado su blog.

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  6. Un regalo que espero que te guste.

    A veces medito,
    a veces medito, y medito más hondo, y aún más hondo
    y todo el misterio de las cosas aparece para mí como aceite en la superficie,
    y todo el universo es un mar de caras y de ojos cerrados hacia mí.
    Cada cosa —un farol en la esquina, una piedra, un árbol—
    es un ojo que me observa desde un abismo incomprensible,
    y desfilan en mi corazón los dioses todos, y las ideas de los dioses.

    ¡Ah, que haya cosas!
    ¡Ah, que haya seres!
    ¡Ah, que haya forma de haber seres,
    de haber haber,
    de haber cómo haber haber,
    de haber...!
    ¡Ah, que exista el fenómeno abstracto —existir,
    haber conciencia y realidad—,
    lo que quiera que esto sea...!
    ¿Cómo puedo expresar el horror que todo esto me causa?
    ¿Cómo puedo decir cómo es esto para que se sienta?
    ¿Cuál es el alma de que haya ser?

    Ah, el pavoroso misterio de que exista la más pequeña cosa.
    Por qué el pavoroso misterio de haber cualquier cosa
    Por qué el pavoroso misterio de haber...

    Fernando Pessoa

    .....................

    Y yo hago mi versión un poco continuación del poema de
    Fernando Pessoa


    Y sí, por qué haber haber... a ver lo que no se ve más allá de las narices, no comprender comprender lo que no se puede ver ver puede parece que no existe existe aquello que no se dice por escrito escrito, que escribir escribir con la mano escriben cosas ininteligibles los que saben más tú y yo. Y es que haber haber siempre ha sido un misterio pavoroso...
    Que no se sabe si hubo haber ni si estuvo, o si ahora que está, resulta que se fue.

    Andri Alba

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  7. Erre, gracias por la visita. Disfrute.

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  8. Andri, naturalmene que Pessoa me encanta. Pero emulas muy bien al maestro. Y eso es muy gratificante. Hay algo surrealista en tu escrito pessoano.

    Boa noite.

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  9. Entiendo que los sentidos provocan las ideas, éstas a las palabras y las palabras (principalmente su oralidad) al gesto. Que entre en escena la reflexión -en este proceso- ha sido estupendo, porque el silencio, ése silencio también es protagonista ¡cuánta carga emotiva tiene el silencio cuando se espera un pronunciamiento, una palabra o un gesto! Resumo: Deseo-idea-palabra-gesto. Y puedo, por supuesto, estar muy equivocado.
    Un abrazo, Jean (me ausenté un tiempo).

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  10. Julio. Acaso ese conjunto deseo-sentidos-ideas-palabras se nutra mutuamente. En función del concepto, que a su vez va re-elaborándose. Pero no nos importe errar. Seguimos buscando, ¿verdad, hermano?

    Gracias.

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