miércoles, 2 de marzo de 2011

Placidez



Arrobado ante los acontecimientos que no parecen ir con uno mismo. No condicionado por la urgencia ni por la responsabilidad ni por la exigencia. Un estado ajeno a cualquier obligación, apartado del cumplimiento del tiempo inexorable. Sentirse en un abandono que no es pérdida, en un aislamiento que no es huída, en una complacencia que no es ocupación.  




4 comentarios:

  1. No sé si son tus palabras las que dan fuerza a tus imágenes o es al revés, y aunque me parece que tanto unas como las otras ya dicen mucho por sí mismas, reforzándose mutuamente adquieren un sentido muy especial, es como observar los pequeños detalles con la mirada de los ojos que las capturaron. Como verlo dormir así, tan plácidamente…
    Casi sería una osadía por mi parte separarlas, pero seguro que no voy a poder resistirme. Mil gracias por tu ofrecimiento.

    Es un gusto perderse por aquí, leyendo, pensado, y observando…

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. RPPoesía. Fotografías a disposición de quien le digan algo. Toma las que te gusten. La mirada es palabra, y la palabra es mirada. Lo de menos es qué es primero. Hay un vínculo. Por supuesto, hay que querer mirar. Buscar lo que tienen los objetos en sí (muchas veces oculto) Advertir significados que son obvios pero no siempre suficientemente claros (por la ceguera del observador) Llegar al objeto en una especie de intercambio (visual y verbal)

    Mucho podría hablarse del tema.

    Gracias por la sensibilidad que muestras.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Es como entregarse a ser volátil y quedar suspendido en tiempo y espacio a la vez para concebir la magia de un instante.
    Muy bueno tu blog, tus imágenes, gracias por dejar tu huella en el mío. Bsos

    ResponderEliminar
  4. Nueva Luna. El mérito de esa percepción nuestra (hago mío tu criterio) reside en el artista que concibió y realizó el trabajo. Cuando concluya esta pretendida serie de mi particular visión (o adaptación a mi capricho, más bien)de estas figuras, tal vez hable de la mano que las hizo posibles.

    Con todo y con eso, no son las esculturas más representativas del artífice, yo creo que ni siquiera las hizo la misma persona que realizó el retablo de donde están extraídas.

    Gracias por echar un vistazo a lo que hay detrás. Simplemente la naturaleza en su estado dinámico (a veces parece que permanece quieta, pero no) brinda instantes que hechiza a nuestra mirada.

    Besos.

    ResponderEliminar