"Tú no estás dormida ni despierta: tú flotas en un tiempo sin horas" Carta de creencia. Octavio Paz

sábado, 1 de noviembre de 2025

Senufo (9)

 



Y yo le entiendo. Somos las dos caras de la misma hermandad. También las dos máscaras de lo diverso. ¿Es por eso por lo que nos llevamos tan bien? Sus enemigos son los míos del mismo modo que los míos son sus adversarios. ¡Siendo tan diferentes! Sois tal para cual desde niños, dicen nuestros mayores. Habéis reñido, pero en camaradería. Os habéis echado una mano  en las dificultades. Ninguna de vuestras vidas queda pendiente de ser compensada por el otro porque ambos os habéis protegido mutuamente. Yo comprendo que Bolom necesite demostrar liderazgo con los demás siendo tan hábil en la caza. Él acepta que yo no me incline por la sed de sangre que a veces exhiben los cazadores. Un día me lo dijo: no me avergüenzo en absoluto de ti. Lo que nos salva es que nos complementemos.


jueves, 30 de octubre de 2025

Senufo (8)

 


Clarea lentamente el día. No soy el único que ha abierto los ojos. Mi amigo Bolom, que es desde niño un verdadero hermano, no se ha quedado atrás. Pero él no es tan contemplativo. Si otea el horizonte y mira al cielo, ambos tan aparentemente imperturbables, es para saber si será oportuno avisar a los demás y coger las armas. Los días pueden parecer iguales pero hay que escuchar antes la voz de la sabana, invocar los espíritus favorables, intuir los peligros que la naturaleza oculta. Es un especialista práctico. Ni mis oídos ni mi vista ni mi olfato van a la zaga de los suyos, pero mi afán es diferente. Él me entiende y me defiende ante los juicios de los demás. Para compensarlo suele decirme cuando estamos a solas: entiéndeme también tú a mí.  


lunes, 27 de octubre de 2025

Senufo (7)

 


Por qué madrugas tanto si no es temporada de caza, me preguntan con ironía. Les parece que soy poco diestro para esa actividad. Incluso un peligro porque expongo a otros. No es que no tenga puntería, ni que no acierte a tensar bien el arco. Es que me cuesta abatir animales, aunque sepa que son parte de nuestro sustento. Siempre dudo cuando en círculo nos aproximamos a algún antílope, por ejemplo. Me invade una sensación depredadora superior y me freno, por lo que arriesgo la caza o puedo causar un accidente si se produce un malentendido y el animal acosado rompe el cerco. Más de una vez les he dejado plantados. Así que no me consideran un cazador fiable. Algunos que no me lo perdonan van diciendo que no tengo sangre de los antiguos guerreros de la tribu. Creo que entonces mi silencio les enerva. Qué les puedo decir. ¿Que mis habilidades no se inclinan por la atrocidad?



jueves, 23 de octubre de 2025

Senufo (6)

 


Si viniese alguien de fuera del poblado diría que todas las chozas son iguales. Es la primera visión de quien llega de otra parte de las llanuras donde se desarrollan nuestras vidas. Si el viajero procede de páramos más fértiles su sorpresa será mayor. Una vez llegó una familia nómada desde confines que nunca supimos situar y preguntó si las viviendas estaban levantadas por la misma mano. Mi padre, sarcástico como pocos, no obstante su bondad, les contestó que sí. Como pusieran ellos cara de asombro y complacencia mi padre se lo aclaró. Aquí, cuando nos ponemos todos a una tarea somos una misma mano, una misma cabeza, una única voluntad. Los recién llegados entendieron un tiempo después que de ese comportamiento dependía nuestra supervivencia.


 

martes, 21 de octubre de 2025

Senufo (5)

 



Mientras rodeo el lento despertar de la aldea imagino que las máscaras han tomado la iniciativa a los pobladores. Que la máscara de la bondad sobrevuela. Que la del infortunio corre y se aleja buscando el abismo. Que la de la abundancia deja de ser un deseo para hacerse más palpable que nunca. Que la que encarna la ira de la naturaleza se reconcilia con nosotros. Que la que representa el enfrentamiento violento entre humanos modifica sus acusados rasgos y dibuja una sonrisa embobada. Que la que simula enfermedad recupera tonos vigorosos. Solo hay una máscara que se resiste a ser soñada, esa que con su faz oscura y poco desentrañable parece permanecer a la espera.   


jueves, 16 de octubre de 2025

Senufo (4)

 



Desde fuera dedico un pensamiento fugaz a los que aún no se han sumado al alba. ¿Estarán despiertos en sus sueños? Y dentro de ellos, ¿qué sueños viven? ¿Semejantes a los míos? Aun compartiendo todos nosotros paisaje, compañías, costumbres y actividades, ¿qué nos diferenciará en ese mundo secreto, incontrolable que son los sueños? Me lleno de las voces que descienden de los árboles, que emergen del sotobosque, que trasiegan por los cielos, mientras el horizonte abre la oscuridad. Suaves líneas de coloraciones inquietas. Presencia de la luz que va anunciándose lenta pero imparablemente.


domingo, 12 de octubre de 2025

Senufo (3)

 


Me recreo en el tiempo detenido. Cuando nadie sabe de mí no me siento obligado a responder a las solicitudes de los demás. Yo y mi máscara, que se revela como desconocida, conversando mutuamente. Ella que proviene de otro mundo y relata sus cuitas. Yo que le hablo de mis preocupaciones y advierto que me escucha con una atención que no me prestan los que viven conmigo. ¿Intercambiamos nuestras apariencias?, pregunta la aparecida. Si yo soy tu imagen y tú la mía, ¿cómo nos entenderemos?, respondo. Ella, la otra, no se arredra. ¿No será que temes que no te reconozcan quienes te acompañan habitualmente? ¿No será que te desconcierta ver tu vida desde otro lado que no conocías?

  


viernes, 10 de octubre de 2025

Senufo (2)


 

Cuando no me ve nadie actúo. Imagino que me he puesto la máscara. Recorro entonces la aldea y simulo penetrar en cada choza. Pero no paso de su entrada. Luego rompo el perímetro del poblado y me adentro un tramo en terreno que distingo pero que nunca acabo de conocer del todo. Es la hora de nuevos rumores que van desadormeciendo y que se confunden con rugidos lejanos, con cantos de aves imprecisas, con silbidos de aires bondadosos que de pronto se paralizan. Creo saber de dónde procede cada señal pero el alba me confunde. Mi actuación crece y mi máscara me suple. Ya no soy solo yo sino que el personaje me hace crecer.  



jueves, 9 de octubre de 2025

Senufo

 


La luz es aún muy tenue. Los sonidos de la noche dan paso a otros sonidos. Salgo al exterior donde también los olores del amanecer son diferentes. Nadie más ha despertado. Es en estos momentos cuando mejor percibo la soledad acompañada. Madrugo para elegir la soledad. Ahí, en ella, aquí, en mí, justo donde el tiempo y el espacio son uno. Donde fecundan al hombre. La familia sigue latiendo en sus sueños. La tribu se silencia en sus chozas. Soy el instante. Donde todo está detenido sin que se haya parado. La naturaleza es mía porque yo soy de ella.

 

sábado, 2 de agosto de 2025

Antropofagias (y 30)

 



...aquí morimos, dijiste, fuimos aves y nos nutrimos mutuamente, y qué más podemos pedir, dije, ¿y a partir de ahora?, nos interrogamos, a partir de ahora nada cambia pues estamos muertos y más allá de nuestra propia mutua desaparición el uno en el otro no puede haber más muerte, ¿te arrepientes?, pregunté, solo se arrepiente uno de lo que estuvo mal y se siente culpable, respondiste sin dudar, pero en nosotros solo ha habido inocencia, hemos sido voluntariamente inocentes, pues solo la búsqueda de la inocencia permite a dos humanos descender a lo desconocido, ¿quieres decir que en lo desconocido o, mejor dicho, en acometer el desafío de lo desconocido se encuentra la salvación?, la salvación no existe si eres inocente, la salvación es un espectro que se ofrece a los culpables, no tenemos de qué salvarnos, nuestra salvación fue llegar el uno al otro y vaciarnos en las vidas pendientes, desalojarnos de lo que borraba nuestro desconocimiento, lo que impedía satisfacer la vida, y solo esta muerte mutua nos ha satisfecho, ¿y a partir de ahora?, y me pareció la frase de ella una súplica,  y yo dije ahora será siempre ahora




(Imagen de Inés González Soria)

viernes, 1 de agosto de 2025

Antropofagias (29)

 



...gimo con tus gemidos, digo al hombre, susurro con tu voz tenue, me dice él, tiemblo con tu propia piel insisto, me estremece la tuya que llevo puesta, me revela, siento que mis manos alargan tus dedos y que mis caricias son las tuyas y que mi abdomen presiona sobre ti como si fuera el tuyo, te absorbo como si buscara la oquedad, arriesgo, devoro como si ansiara tu prolongación, se aventura, nuestros cuerpos han girado sobre un eje insólito impensable con nadie más que contigo, digo, hemos empezado a aprender aunque la vivencia sea efímera pues no hay encuentro intenso que sea pasajero, dice, ¿llegaremos a lo profundo?, pregunto, ¿sabremos emerger desde allá abajo?, pregunta



(Imagen de Inés González Soria) 

jueves, 31 de julio de 2025

Antropofagias (28)

 



...si ella viene a este lado y yo voy al suyo, si siento mi cuerpo como si fuera el de la mujer, si dejo de exigirme ni pretendo nada sino girar envuelto en el movimiento que trueca las sensaciones, si de dos sexos se hace uno que nos multiplica, si se pierde la noción de los órganos y no se sabe si son mis manos o las suyas, si es su torso o el mío, si es su pubis o mi pelvis, si no distinguimos las bocas porque son una sola corriente, si yo recibo o ella acomete, si nuestros cabellos se enmarañan hasta hacernos pender de lejanos y oscuros secretos de otros individuos que nos precedieron, si esa vorágine es la ensoñación que ella propone lúdicamente



(Imagen de Inés González Soria)  

martes, 29 de julio de 2025

Antropofagias (27)

 



...estoy y no estoy, si esta presencia que se apura en mí es también la suya o si se ha transfigurado para que yo sienta como él, como si hubiera balbuceado: quiero que imagines que tú eres yo y que yo me he desdoblado en ti, y le he respondido también dubitativa: este es el instante en que todo es posible, ser el otro sin dejar de ser uno, es el punto en que dos cuerpos se abstraen de sí para fantasear con el otro lado, eso me ha dicho el hombre, y me ha producido un escalofrío pues cualquiera nueva propuesta hiela y hace temer aun cuando se pronuncie con ternura, y he sentido el latigazo del vínculo alterándonos a los dos, y nos hemos entregado a una ensoñación inédita



(Imagen de Inés González Soria)


lunes, 28 de julio de 2025

Antropofagias (26)

 



...cómo escriben sus sensaciones sobre las mías, de dónde llega un cuerpo que se multiplica para mi cuerpo, ella apaciguando mis sacudidas, reconduciendo mis manos, desplazando mi torso, iluminando mi boca, borrando lejanas miradas para convertir en nueva la que derramo sobre ella, la mujer arrastrándome a los lenguajes más ancestrales y a las escrituras no nacidas, ¿estarán inventando nuestros dos cuerpos un alfabeto donde solo ambos podemos entender nuestras necesidades?, un abecedario que pergeñe trazos que nos sacien, que sedimente significados que no habíamos entendido antes, que nos expulse del mundo cutre y cobarde



(Imagen de Inés González Soria) 

sábado, 26 de julio de 2025

Antropofagias (25)

 


...te entregas al placer pausado de la contemplación, escudriñas cada gesto de sus facciones, atiendes los movimientos débiles para que un cambio de postura no perturbe el cortejo al que os entregáis, aspiras la acritud de su sudor, incluso lo saboreas, revuelves las ondulaciones de su cabello, sabes que no debes esforzarte en él, que solo debes dejarte llevar por ti misma, no quieres que él inquiera sobre ti y menos verbalmente, lo deseas espontáneo, no importa si hay torpeza porque esta también te estimula, no le quieres sabio sino solamente animal, y abres toda tu animalidad secreta para que él se desborde en ella rompiendo prejuicios e impericias



(Imagen de Inés González Soria)

viernes, 25 de julio de 2025

Antropofagias (24)

 



...uno no sabe si sobrevuela o se sumerge en este paisaje inesperado, si pende o fija sus pies, si atiende a voces nunca escuchadas antes o es cautivado por el rumor silente de una fontana secreta, si lo que le apacigua es una ribera fértil o la sedosidad de unas dunas que contienen los oleajes, si corona una elevación o se adentra en la cavidad protectora de los orígenes, uno no sabe si debe afirmarse en la fugacidad de los pensamientos o disolverse en la marea turbulenta de sensaciones incontroladas, y mira a la mujer y la interroga con la expresiva mudez que emite el pálpito de sus cuerpos deslizantes, donde la confusión deletrea un nuevo abecedario



(Imagen de Inés González Soria) 

jueves, 24 de julio de 2025

Antropofagias (23)

 



...me invade su lentitud, esa actitud suya que no es inexperta pero tampoco apremiante, esa búsqueda parsimoniosa palmo a palmo de espacios que aun conociendo yo misma en mi cuerpo no son tratados del modo conocido, ni según su dominio ni según la torpeza, y esa apreciación que me trasmite de que a medida que me explora también él se tantea enardece mis sentidos, ambos arrojados a una levedad a través de la que parece que no fuéramos a llegar nunca, que genera un ámbito ignoto, que no me hace reclamar ninguna presencia pretérita, por la que no echo de menos lejanos placeres que se tenían por elevados o no traspasables



(Imagen de Inés González Soria)

martes, 22 de julio de 2025

Antropofagias (22)

 


...y ahí ella hace de su territorio silencio, ¿se abre o se aísla?, y de pronto me susurra no pienses en mí sino solo en ti, pero me doy cuenta de que no sé estar si no percibo sus señales, ¿o este abandono de ella no es toda una señal que debo seguir para dar también con mí mismo?, soy todo levedad sobre su cuerpo, lo contemplo, lo tomo como modelo, lo esbozo, que mi mirada lleve el compás del deleite, ahí donde cada espacio se armoniza y se traduce en belleza, cada ámbito y sus expresiones, ese sudor vaporoso, esa quietud tensa, ese aroma acerbo, el contenido estremecimiento de la mujer que me alienta, lenguajes todos ellos que obran agitadamente sobre mis sentidos



(Imagen de Inés González Soria)  

lunes, 21 de julio de 2025

Antropofagias (21)

 


...y de pronto su caída, ciega, expuesta, orante, inesperada, pero que acojo con asombrada placidez, él que desplaza su boca suavemente por mi piel, él que pronuncia delicadas preces cuyo eco no me llega sino traducido en sensaciones, él que me roza apenas, que deambula por un territorio que no conoce, que va llegando a mi calor, que busca saber a mí sin que yo apenas le domine, me gusta su capacidad de prospectarme, el prudente avance de sus emociones en busca de las mías, la lasitud a que me entrego, no como forma de pasividad, sino de recepción, como si le dijera a ti, que llegas, te recibo para que me explores



(Imagen de Inés González Soria) 

domingo, 20 de julio de 2025

Antropofagias (20)

 



...has extendido tu mano tosca hasta su espera, has levantado despacio el velo del deseo, ahora solo atiendes al ritmo que surge paulatinamente desde ambos, las miradas espaciadas, los movimientos aturdidos, las respiraciones tenues, arriesgas viejos aprendizajes sin saber si esta vez tendrás que volver a aprender, y ella puede estar pensando lo mismo, ella ¿espera de ti un nuevo descubrimiento o se debate entre el temor a no ser sorprendida y dejarse llevar una vez más por una concesión convencional?, pero ni tú ni la mujer os ausentáis, ninguno de los dos se aleja del otro, tejéis con el hilo del arrebato que se abre paso entre vuestros cuerpos dúctiles




(Imagen de Inés González Soria) 

miércoles, 16 de julio de 2025

Antropofagias (19)

 



...desearías que él se dejara de indecisiones y quiebros y permitiera que le rodeases con tus manos hacendosas o aunque no cediera del todo que al menos estuviera a tu merced y sintiera que tu tanteo volátil pronuncia propuestas y no se impone con impunidad y que percibiera que la extensión de tu gesto de ofrecimiento es una bienvenida donde tu puerta está abierta sin condiciones o tal vez solo con el requisito de que él no se sienta extraño dentro de tu casa mas esto no es posible saberlo mientras él no traspase tu umbral y tú no le indiques que puede acomodarse sin sentirse extraño ni estar alerta por tu insistente reclamación
 



(Imagen de Inés González Soria)

lunes, 14 de julio de 2025

Antropofagias (18)

 


...la observas en el despojo de sí misma, sin saber si se acerca o se distancia, ¿cómo captar la actitud de la mujer si no revelas tú la propia?, la mía es nítida, piensas, pero ignoras si será la que ella desea, porque acaso lo que la mujer busca no es lo que tú crees manifestación sincera, o no es simplemente la sinceridad lo correcto, no es tal vez la muestra abierta de uno lo que se demanda desde la otra parte, uno puede ser un monstruo muy sincero pero no elimina lo aberrante, hay monstruos que se hacen querer, se te ocurre, hasta lo deforme y lo grotesco tienen su atractivo, y de pronto caes en la cuenta de que tu pensamiento va por mal camino y desearías que ella te ungiera con su bondad siquiera para aliviar tu pequeñez 



(Imagen de Inés González Soria)

domingo, 13 de julio de 2025

Antropofagias (17)

 



...sin presura te has ido dando la vuelta para que el hombre apure la  lectura hasta en tus márgenes, ¿no es en los extremos de las líneas donde puede haber interpretaciones reveladoras?, ¿no son las zonas fronterizas ubicadas en cualquier parte de un perímetro donde se funden elementos y vidas, generando la novedad de lo diverso?, y vas girando sobre ti misma con una indolencia sutil, sospechando que él lo interpretará como el acercamiento definitivo, pero te demoras, dejas que tu mirada se pierda desinteresada, y tu contención está preñada de deseo pero a su vez ahita de un riguroso control de los tiempos




(Imagen de Inés González Soria)


sábado, 12 de julio de 2025

Antropofagias (16)

 



...al contemplar su espalda crees estar ante una tablilla de arcilla, repasas de derecha a izquierda sus trazos cuneiformes, te esfuerzas en una traducción, ¿estará escrita en esa piel la historia de la mujer?, te tienta colocar el dedo sobre cada signo pero su linealidad no es la misma a la que estás acostumbrado, quiero ser tu alumno, le dices a ella, pero la mujer calla y distiende su cuerpo, y entonces este no solo te muestra un alfabeto o una narración sino también los mapas de geografías que jamás habías observado anteriormente, y desde la acumulación de sus poros se emite un clima que no se parece a ninguno al que te has acogido hasta ahora





(Imagen de Inés González Soria)

viernes, 11 de julio de 2025

Antropofagias (15)




 ...pausadamente la mujer va saliendo de otra encarnación, eclosiona sin inquietud, desalojando en cada movimiento cuanto no es sino accesorio y superfluo, tal vez borra en el ejercicio los recuerdos de otras personificaciones, pues bien sabe que según el ámbito donde haya sedimentado anteriormente y los seres con los que haya fraguado búsquedas han sido situaciones culminadas, carentes ya de interés, y al despojarse de aquel bagaje se encuentra más predispuesta a la novedad, a la prueba de un descubrimiento que acaso tenía pendiente desde remotos paisajes y ancestrales pasiones, con objeto de cubrir vacíos de la emoción y abrigar solicitudes inéditas





(Imagen de Inés González Soria) 



jueves, 10 de julio de 2025

Antropofagias (14)

 


...el primer pulso siempre es la mirada, pero si el hombre piensa que mantener la fijación supera la otra capacidad observadora probablemente se equivoque, él mira de un modo que se pretende impositivo, la otra mirada aparenta someterse, él quiere decirlo todo de sí mismo, ella se difumina, él va elevando toda su envergadura, la que tiene enfrente regatea los movimientos del otro, el hombre se crece totalizador de cuanto le rodea, la mujer permanece sutil y silenciosa, él de pronto no avanza, no sabe, no puede y tiembla, tratando de ocultarlo, ella se ha apoderado de la otra mirada y sin moverse avanza, el otro intenta salvar su iniciativa, pero la mujer se ha adueñado de esta y la ha reducido



(Imagen de Inés González Soria)  

martes, 8 de julio de 2025

Antropofagias (13)

 


...dejas que vea cómo te despliegas, mitad ave mitad pez, y tratas de confundirle para que no sepa si desciendes de un lejano vuelo o emerges del ancestral piélago, si tu cuerpo pertenece al éter o lo forma la sal de las olas, si acumula tiempo o es la mirada de un instante, y tentada por tu capacidad de seducción ingenias una danza de desconcierto en torno a su espera, y en ese revoloteo en que las algas se esparcen por tu propia costa zarandeas su inquieta contemplación, agitas los silencios que él encubre, contienes la pulsión que revuelve las vísceras del hombre, y mientras te ofreces él calla y se deja conducir por la ebriedad latente de tu baile arcano    



(Imagen de Inés González Soria)

lunes, 7 de julio de 2025

Antropofagias (12)

 


...ni eres un pavo real ni ella un pajarillo, olvida las metáforas y déjate conducir por el instinto, o ¿acaso pensabas que las palabras que elaboran deslumbrantes artificios podrían sustituir la inteligencia de las dimensiones que amplían tu cuerpo? o ¿no han sido las sensaciones las que existieron antes que cualquier discurso? o ¿no creciste con las convulsiones confusas antes del primer balbuceo? o ¿crees que aquello, lo primigenio, había desaparecido para siempre? o ¿pensaste con soberbia que era tu pensamiento racional el que había desplazado definitivamente al animal que sigues portando contigo? mas el golpe de sed te arroja a otra clase de conocimiento porque te atrae el caos



(Imagen de Inés González Soria)

domingo, 6 de julio de 2025

Antropofagias (11)

 



...te sorprenderás, susurraste, pues quien fue ave puede ser árbol, y siendo árbol qué ramaje no es capaz de ser extendido sobre la confusa aproximación de un hombre, pues ¿hay algo más representativo, y sobre todo útil, que la envoltura vegetal capaz de capturar la presa al acecho?, son ensoñaciones mías, te repetías una y otra vez, pero una ensoñación es también conciencia, pensaste, es disposición a recibir lo desconocido y al ente que no solo encarne el deseo, sino que coincida en la enramada que crece y que tiene delante todavía la savia suficiente para satisfacer lo pendiente y confirmar lo comprobado, despreciando el riesgo y sorteando las tormentas que reducen pero a la vez hacen crecer




(Imagen de Inés González Soria)

sábado, 5 de julio de 2025

Antropofagias (10)


...de si era ella la que anidaba o tan solo estaba de tránsito o buscaba un calor del que había carecido tú eras ignorante y no podías saber que tu rostro se iba difuminando a medida que se asentaba dentro de ti y que el resto del cuerpo seguía a tus facciones deshilvanándolas y los hilos de la urdimbre que habías tenido hasta entonces se dispersaban como esporas y lo que creías un sueño en realidad estaba constituyéndose en una posibilidad o en un otro insospechado o en la novedad corpórea que solo espera nuevas manifestaciones de las que iban llegando las más decididas por la vía del susurro como una caricia mansa en su terneza



(Imagen de Inés González Soria) 

viernes, 4 de julio de 2025

Antropofagias (9)

 


...dije: solo te permito a ti que descubras lo que hay bajo mi plumaje, si es un nuevo plumaje o hay una especie distinta debes indagar antes de que obre en mí otra metamorfosis, pero no pretendas rescatarme a cualquier precio, puedes perecer o simplemente perder mi cuerpo, y si lo pierdes tampoco llegarás a entender el tuyo, porque una vez, en una dimensión de la que no existe memoria, otro cuerpo semejante al tuyo y al mío se partió y anda buscándose a lo largo de un tiempo que no reconstruye sino que divide más, y en la división nunca vuelves a ser el mismo, y como tu rostro revelase duda insistí: solo puedes llegar tú



(Imagen de Inés González Soria)

miércoles, 2 de julio de 2025

Antropofagias (8)

 


...no vio en ti solamente al hombre pájaro ni su vuelo había sido tuyo anteriormente ni acaso estabais destinados a volar juntos, pero merecía la pena, te dijiste, otear desde una nueva altura que os sacase de la afasia en que cada cual habíais vivido, no se sabe nunca si no se da un paso, pensaste, y ese paso tiene que estar repleto de sensaciones, algunas tal vez abruptas, se debe apostar para que ella vea, aunque no se le resuelvan sus dudas, pero nada está pensado previamente, de poco sirven experiencias pasadas, porque cada nueva mujer ave que aparece en tu vida no es la anterior, ni tú sabrás aletear con ella del mismo modo que en otras ocasiones, pues el rumbo siempre es distinto



(Imagen de Inés González Soria)

domingo, 29 de junio de 2025

Antropofagias (7)

 


...en el arrebato onírico te convertías en la mujer ave, tu cuerpo se cubría lentamente de un plumaje del que apenas sobresalían unos ojos apagados, extrañamente configurados, que no parecía que quisiesen ver, que eran ojos de otra procedencia que apenas atisbaban el destino de un nuevo paisaje, un paisaje sobre el que no mostrabas inquietud, porque en el fondo del sueño realmente deseabas aquella metamorfosis, y si me tomara la ave macho, te decías, ¿opondría resistencia?, y si la levedad de otro plumaje me cubriera ¿rechazaría el implacable golpe de su acometida?, y si un aleteo silencioso separara mis plumas y yo despertara sosteniendo en mis garras los restos de otro plumaje perdido



 (Imagen de Inés González Soria)

sábado, 28 de junio de 2025

Antropofagias (6)

 


...si eligió al hombre que eras es porque había elegido antes al que fuiste, sin que ella se propusiera dotarse de imágenes visibles, porque el rostro y el cuerpo que uno va dejando atrás no es recuperable y las fotografías proponen pero no resuelven, incluso para uno mismo la memoria de cómo fue se ha ido disolviendo y lo que sobrevive de otro tiempo es parte del arcano que cada cual transporta, y no sabes si ella ha preferido lo que le ofreces o lo que ha ensoñado y vuelca sobre tu presencia, si es un hombre por venir o una personalidad que ella va generando de acuerdo a sus necesidades, aunque es probable que tampoco la mujer sepa sino acatar la sorpresa de lo inesperado



(Imagen de Inés González Soria)

lunes, 23 de junio de 2025

Antropofagias (5)

 


...tal vez tratabas de prolongar la evasión de tu mente, ignorando el vuelo ajeno que buscaba tu territorio. O era una táctica para frenar el ímpetu de quien te buscaba con avidez. Solo si yo quiero y cuando quiera, pensaste, simulando falta de receptividad. Pero el juego de las simulaciones debe tener sus cálculos. Si demoras el despertar acaso ya no esté él ahí. Si precipitas los signos de tu deseo puedes ser equívocamente interpretada. Escuchas tus propios latidos. Controlas que tus facciones no se alteren. Respiras con la lentitud de quien está ausente. Sujetas las bridas de un cerebro que se debate entre impulsos contradictorios 



(Imagen de Inés González Soria)

lunes, 16 de junio de 2025

Antropofagias (4)

 


...¿De dónde vino el hombre? ¿Desde qué reino natural se incorporó al tuyo para que el azar os pusiera en el mismo camino? Las preguntas que me hago y ya te hice no han buscado nunca respuesta, sino revolcarse en la perplejidad. Si perdemos la capacidad de asombrarnos distraemos el acercamiento entre nosotros, dijiste y yo, atónito, confirmé. No más preguntas explícitas. Entreguémonos a los ejercicios de aquello que aprendimos en otros mundos. Rodeemos nuestros cuerpos de la floresta o rujamos como fieras extraviadas o alcemos vuelos sin previo destino. Al fin y al cabo somos lo que fuimos, sentencié



(Imagen de Inés González Soria)


viernes, 13 de junio de 2025

Antropofagias (3)

 



...si fueron los sueños el preámbulo o acaso el desenlace de lo que creíste vivir no lo sabrás nunca, pero cerraste los ojos y te pareció que el vuelo del hombre se aproximaba como el plumaje de aquellas aves que acariciabas en tu niñez, y te evadiste de cualquier pensamiento racional, y dejaste de lado los prejuicios y los falsos preceptos de quienes querían controlarte, y trataste de ser como nunca antes habías sentido que eras, aun sabiendo que todo tiene riesgo y que la insatisfacción acecha sobre todo al que no busca la saciedad del instante y quien rechaza el tacto de la materia que complemente tu materia dormida




(Imagen de Inés González Soria)

martes, 10 de junio de 2025

Antropofagias (2)

 


...¿Cuál es la temperatura de riesgo de una caída a través del espacio del abandono y del tiempo del olvido? ¿Cómo es el pulso que late cuando es incierto el lugar y desconocida la acogida? ¿Qué ensayo de retorno fetal parece condicionar a una mujer o a un hombre cuando apenas se sienten a sí mismos y sospechan de un nuevo encuentro? ¿Perciben desde su insólita desnudez el entusiasmo de un renacimiento o el espanto de la muerte? ¿Se protegen como autodefensa o se retuercen perplejos por el desbordamiento? Compleja es la física de los cuerpos que se expanden y se pliegan en el insólito juego de las pasiones



(Imagen de Inés González Soria)

domingo, 8 de junio de 2025

Antropofagias

 



...en el principio debió ser la caída, sin saber cómo ni por qué, viniendo como veníamos de un tanteo visual que era simple curiosidad, pero que trataba de alejarnos a cada cual de su propia noche turbia, de un pasado de pérdida, de una marginación del placer, del olvido del cuerpo compartido, y cuánto hay de claridad en la confusión de la caída, dijiste por decir algo, o por intuir que recuperar el calor extraviado devolvía lejanos esbozos de una torpe pasión, e iniciaba un nuevo saber donde la exploración solo es hija del caos y donde es mejor no registrar orden alguno que cercene las percepciones de los sentidos 




(Imagen de Inés González Soria)

jueves, 16 de mayo de 2024

El alma condenada o De Bernini a Bartolozzi

 



Creo que no hay mayor condenación del alma que la ira. La ira acumula con frecuencia otras característicsa negativas: la soberbia, por ejemplo, la envidia, el deseo de venganza. Entiendo por alma todo ese espectro emocional, afectivo y sentimental que le permite al humano hacer, desarrollarse, intimar.

La escultura que me ha permitido unas reflexiones sobre la ira  es un vaciado en escayola de 1897 realizado por Lucas Bartolozzi Bartolozzi, que estaba al frente del taller de vaciados de la Academia de Bellas Artes de San Fernando. El original de la obra, de 1619, es de Gian Lorenzo Bernini, y está situada en la Embajada de España ante la Santa Sede, en Roma.

Leo por alguna parte que es un autorretrato de Bernini, en un intento de gritar al infierno. Muy teatrero, como el mismo espíritu barroco. Pero todo grito contra algo o alguien es siempre un ejercicio de cólera. A mí me sugirió más un desarrollo terrenal que una actitud contra uno de los elementos necesarios en la narración religiosa. Pero ¿es que el infierno en vida, con todos sus ingredientes de sufrimiento, de causantes y víctimas no es algo puramente humano?

Mi capricho en llamar tiempo gestual a esta mini serie de devaneos es un juego con la gramática latina. Y un homenaje. El tiempo gestual complementa cuando no sustituye al tiempo verbal. Me parecía apropiado conjugar el presente de indicativo del verbo Sum porque es el narcisismo del presente lo que embarga y condena al iracundo. Por lo demás, que cada cual lo entienda como guste.

La copia de Bartolozzi se encuentra en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid.



lunes, 13 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Sunt

 


Si crees que sumar a tu calidad de energúmeno una actitud de desdén te hace más fuerte no te engañes. Cuantos más gestos añadas para imponerte menos crédito mereces. ¿Quiénes te aceptarán? ¿Acaso piensas que harás frente con los que son como tú? ¿Te parece que va a haber entendimiento con quienes adoptan análogas conductas? Abrazar a otros virulentos es engañoso. El encuentro entre vosotros dará paso a la competencia. Tampoco ganará el que más grite o gesticule o alce un brazo contra otros. ¿O crees que esa reunión de coléricos va ser seguida por una mayoría? Apostáis a que muchos, cuantos más mejor, acompañen vuestros pasos y os sentís atractivos para los incautos. ¿Pensáis que todos los demás han perdido la razón?


 

viernes, 10 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Estis

 


Confías tus energías a la precipitación de una lengua que brinca salvaje dentro de tu boca. ¿Dónde entrenaste ese órgano maravilloso para usarlo en los desatinos en lugar de saborear la palabra bella y tranquilizadora? Envidias lejanas de algunos próximos a ti que no supiste frenar ni buscar la colaboración y que potenciaste día tras día. O fue cuando las primeras veces que te exaltaste conseguiste apocar a otros individuos y lo concebiste como un poder. O te sentiste humillado por tu propia personalidad al carecer de una capacidad de entendimiento y serenidad que sí brindaban otros. ¿No te has encontrado jamás con otro iracundo que se impusiera a ti?



martes, 7 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Sumus





Si mantuvieras cierta noción del pudor, ya que el temple no varías, dejarías de girar sobre ti mismo. Si buscas adeptos que te den la razón los encontrarás, pues siempre hay individuos que hacen mayor caso al que más grita o repite. Pero también otros se apartarán de ti y serás señalado para advertencia de muchos. Si solo pretendes el desahogo de aquello que te corroe y te frustra, más te valiera hacer el ejercicio en privado, ante un espejo o asomado al arroyo manso. Si el espejo se raja o las aguas del río se enturbian, no culpes a los elementos. Pero no quieres contemplar tu imagen. Porque también tú la temes.



sábado, 4 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Est

 


No es enervándote de ese modo  como te harás entender. Más bien se apartarán de ti incluso quienes pensaron ingenuamente que tu fervor iba a aportar razón. El corro que se haya montado en torno tuyo se irá distanciando. No son solo las palabras lo que les espanta, aún no. Es la emisión de saliva, la desvirtuación de las facciones, la amenaza sensorial que quienes han acudido a ti aún no perciben en toda su dimensión. Pero otros sí, y jamás te buscarán. Si tus fieles se sentían representados al principio por la fluidez verbal, aún moderada, tienen ahora la sensación de que el iracundo que te invade puede producir sangre.



jueves, 2 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Es

 



Tu gesto denota el ahogo del pensamiento. Es más: ha renunciado a ejercitar la calma. ¿Cuánto hace que no sientes el vivificante reposar de los sentidos? Vocear para imponerte te deja vacío. Quienes te rodean perciben el salpicado de tus salivas y, lo que es peor, la palabra dominadora como insulto. ¿Te extraña si se apartan de ti? Entonces, ¿para qué servirá tu vociferación ¿A quién le importará que te desgañites con tu verbo hueco?


 

miércoles, 1 de mayo de 2024

Tiempo gestual. Sum

 


Motivos tengas, mas reacciones controles. ¿Nadie te lo dijo nunca? Si te vieras desde fuera -el cabello alborotado, el rostro pasto de las arrugas, las cejas violetamente enarcadas, la boca que se desborda, la mirada de víscera rusiente- tal vez no te gustarías. ¿Que te da lo mismo? Faz iracunda la tuya. ¿Quién es el objeto de tu incontinencia? ¿Contra qué haces desgastar tu energía?


miércoles, 9 de junio de 2021

La imposición, las quejas, la superación

 



El rostro angustiado aparecido en la serie Quejas y quejidos pertenece al personaje bíblico Isaac. Forma parte, junto con el personaje Abraham, del conjunto del sacrificio realizado por el artista Alonso Berruguete (Paredes de Nava, 1490 - Toledo, 1561) Es una de las esculturas que plasmó en el monumental retablo renacentista para el monasterio de San Benito el Real de Valladolid. Alonso Berruguete, hijo del importante pintor castellano del siglo XV Pedro Berruguete, viajó a Italia donde permaneció no menos de una docena de años trabajando y recibiendo influencias del pujante y evolucionado estilo que se desarrollaba allí. La obra del citado retablo está expuesta hoy, desmontada y al alcance de la vista del visitante, en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid.







martes, 1 de junio de 2021

Quejas y quejidos. Y 10

 


...¿qué pasa por tu mente cuando el impulso te aleja de tu antigua condición de siervo?, ¿suplirá de inmediato la alegría al dolor?, ¿evocarás fuerzas nuevas, aún desconocidas, en contraste con las viejas?, ¿vivirás la vida con realismo en lugar de generar utopías y mundos ideales?, pues estate en guardia porque la liberación te conducirá a nuevas dependencias, lo elegido no es nunca garantía de independencia definitiva, y consciente de que has escapado de viejas humillaciones deberás estar pendiente de no caer de nuevo en ellas y tampoco de causárselas a otros, tal vez el sojuzgamiento anterior ha jugado su papel y te ha impregnado hasta el punto de hacerte creer que eres otro, pero en ti está no aceptar el engaño, de ti depende no reproducir en los demás lo mismo que hicieron contigo.